Este año he caminado México con talleres, charlas, cuentos y mucha observación, de esa que nos permite crecer, de esa que nos permite sabernos tan diferentes y tan iguales. He conocido pueblos, ciudades, familias tan diferentes a mi alma, que como es de imaginar nuestros extremos se tocaban, y fue sabio "reconocernos".
Este andar me permitió algunas certezas, muchas alegrías y la cantidad necesaria de despertares como para saber que esto recién empieza.
Estoy regresando al sur de este bello continente en breve, volviendo a una tierra donde los cielos son diferentes, donde se piensa de "sur a norte" y no de "norte a sur", donde florece el cedrón y trae agua la "sudestada".
Aquí, donde los chiles hacen hervir la tierra, y se comen cactus de exquisitas maneras, y se bebe tequila o mezcal, según en que latitud estemos; donde se explica el tiempo con un "ahorita" y se habla quedo por infinitas razones... aquí nacieron muchos cambios: EL LIBRO DE LAS PIEDRAS PARA NIÑOS, EL TRATADO DE ESPECIERÍA ALMICO, cientos de cuentos desprendidos de miradas nuevas. Con esto regreso a Argentina, para demostrar que estamos más cerca de lo que imaginamos y que es COMPROMISO de todos compartir, aprender los unos de los otros, y ponernos guaraches en vez de sandalias o zapatillas en lugar de tenis... y que en todos los casos sentir la piel de este continente tan vivo, será un desafío para empezar de nuevo TODAS LAS VECES QUE SEA NECESARIO.
EL AMOR GOBIERNA EL MUNDO, su contracara, el miedo tiene muy buen marketing, es hora de erradicar viejas creencias y construir las nuevas que pugnan por salir, por hacernos sentir que no es necesario aprender por el dolor, Que todo está dispuesto para que maduremos y evolucionemos disfrutando de cada instante y cada suspiro.
ES HORA DE SER CONSCIENTES.
