Mientras mi buena amiga Adriana y su generoso esposo Luis, me ponían al día de la vida aguilarense, yo comenzaba a disfrutar de las inquietudes docentes y de los que están por serlo...
La propuesta de llevar el TALLER DE LA PALABRA ORAL Y ESCRITA surgió de las ganas, de la profesora Liliana Paez, que llena de alegría intuye que muchos de sus colegas tienen la necesidad de compartir nuevas experiencias y fortalecerse en el arte de contar cuentos y sobre todo de hacer hincapié en la IMPECABILIDAD DE LA PALABRA.
Así que a esto fuímos...
Como siempre la experiencia fue amplia y de un ida y vuelta perfecto y armónico. No dudo que mi trabajo es absolutamente fortalecedor para mi persona, ya que de cada encuentro me llevo "un algo" como pegado al alma. Reconfirmaciones de que ese es el camino y la escucha permanente que me enseña sobre la diversidad de realidades en la educación nacional.
¿Qué es ser impecables con la palabra?
"La mente humana es como un campo fértil en el que continuamente se están plantando semillas. Las semillas son opiniones, ideas y conceptos. Tú plantas una semilla, un pensamiento, y éste crece. Las palabras son como semillas, y la mente humana es muy fértil".
(Los cuatro acuerdos: la impecabilidad de la palabra, de Miguel Ruíz, maestro tolteca)
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